La crianza respetuosa

 La crianza respetuosa

 

 

A lo largo de mi práctica tanto privada como en instituciones públicas me he dado cuenta de la gran dificultad que tienen los padres para implementar una crianza basada en el respeto hacia sus hijos, y aclarando; no es porque no les amen, más bien obedece a las dificultades que manifiestan los padres para hacer las cosas diferentes a las que les tocó a ellos al ser hijos.

 

El poder brindar a sus hijos algo diferente no es sencillo, el haber curado heridas infantiles al estar criando a sus hijos la mayoría no lo logra. ¿Qué quiero decir con heridas de la infancia?  Pues no es más que lo aprendido y dolores emocionales que como adultos todos tenemos; esto debido principalmente a crianzas basadas en el temor o como hoy en día mencionan la chancla voladora que era más común en décadas pasadas.

 

Si bien hemos mejorado algunas prácticas; como lo es el dar a conocer y ejercer los derechos de los niños y ya tener claro que el maltrato a los  niños no está justificado por ningún medio o persona cercana, esto es que como padre o madre no tienes derecho a maltratar en ninguna de sus manifestaciones a tu hijo(a). Aún nos falta mucho por sensibilizar a la cultura mexicana sobre el maltrato infantil, que en verdad se vea la importancia y principalmente el promover los buenos tratos a la infancia como prioridad si en verdad queremos mejorar como país, ya que el maltrato que se ejerce hacia los niños de ahora son los resultados que se tendrán en 20 o 30 años más.

Bajo ninguna circunstancia se justifica el maltrato hacia los niños y si aún escucho en ocasiones el “por tu bien” “para que seas mujer/hombre responsable” el maltrato no hace eso. En la práctica de psicoterapia escucho día a día personas afligidas y angustiadas debido a la crianza que les tocó recibir en su infancia; hay algo que ocurre cuando se sufre maltrato de niño(a), algo llamado naturalización del maltrato.

 

Pero ¿qué es la naturalización del maltrato? No es más que ver como algo “bueno o positivo” en brindar algún tipo de castigo físico o bien maltrato emocional-psicológico. Muchas personas justifican esta conducta manifestando que lo hacen por el bien de sus hijos, pero queda claro bajo años de estudios que el maltrato lo único que hace es desgastar esos lazos y vínculos que se tienen con figuras que deben brindar cuidados y protección.

 

Actualmente el basar la educación de los hijos en una crianza positiva y llena de respeto garantizará mejores generaciones de personas sensibles y más empáticas con los demás.

 

Si en tu caso no sabes cómo acercarte o ejercer tu rol de padre/madre de una manera respetuosa es buen momento de buscar ayuda profesional. Podrás ser responsable de mejorar las cadenas de buenos tratos para futuras generaciones para tu familia.

 

Por: Mtra.  Jannet Palacios Ochoa

Especialista en psicoterapia con padres, niños y adolescentes

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